Seguramente haz escuchado o comentado «Este tipo rola como se fuera la final del mundial» o «Este tipo es un Bully del tatami» y muchos prefieren evadirlo.
Recuerdo cuando era cinta blanca y fui a entrenar a una academia en San Diego por un tiempo, había un tipo cinta azul que me llevaba unos 30 kilitos. Cada que luchaba con el me aplastaba, me hacia rodilla en barriga con ganas de que vomitara… recuerdo que si llegue a enojarme y pensar ¿Que trae en mi contra?. No lo comprendí y creí que simplemente le caía mal.
Ya con los años de entrenamiento he aprendido a estar tranquilo bajo presión, aunque eso no me salva de tener rounds del infierno seguido, como hace dos semanas por ejemplo. Un cinta negra bastante competitivo me invito a luchar, trate de hacer lo que pude hasta que me puso en una posición complicada, esta posición era como un tipo twister pero en control desde 100kg. No pude ver los detalles porque mi cabeza estaba atrapada hacia un lado y mi cadera al otro.. Después de 3 intentos fallidos de escape, es cuando ya me empiezo a faltar el aire, la presión siguió, sentí como si tuviera un camión arriba de mi, recuerdo que vi el reloj y faltaba 1 minuto, el minuto mas largo del mundo…. En mi mente decía «por piedad ya someteme para poder tapear», pero no lo hizo. En esta ocasión no pensé que tuviera algo en mi contra, el es uno de los tipos mas amables que conozco, mas bien fue un Wow!, como es posible que con años de entrenamiento, llega otro tipo y te hace sentir como un niño de 5 años, simplemente indefenso.
Hace poco Josh Hinger, cinturón negro campeón mundial NOGI, hizo un comentario muy interesante respecto a este tema. Comento:
«Si tomas personal cuando te destruyen en el jiu-jitsu, no debes culpar a tu compañero. El solo está haciendo su trabajo. Controla, aplasta, y somete. Ese es el punto del jiu-jitsu. La incomodidad es el nombre del juego. No es el trabajo de tu compañero cuidarte. Claro, pueden ayudarte a veces. Pueden hacer una rolada fluida o explicarte posiciones. Hay un momento y un lugar para ayudar, y un tiempo y un lugar para aplastar. Pero si están entrenando y entrenando, no deberían tomarlo como algo personal. Si lo haces, quizás tengas algunas inseguridades en las que trabajar. Innumerables veces, la gente ha terminado una rolada de entrenamiento conmigo y luego me pregunta si estoy enojado con ellos. No estoy enojado. Solo estoy entrenando, no estoy pensando en alimentar tus inseguridades. Estoy pensando en lo rápido que puedo envolver tu cuello. Tus inseguridades no son mi problema. No me inscribí en el jiu-jitsu para ser un muñeco de lucha o un costal de box. Me inscribí porque quería aprender cómo romper a las personas física y mentalmente sin lesionarlas. Ser aplastado es parte de ese proceso. Y déjame decirte que ser aplastado no es algo con lo que solo los principiantes tengan que lidiar. Me aplastan semanalmente. La única diferencia es que agradezco y felicito a mis compañeros de entrenamiento después de que me destrozan. A diferencia de poner alguna excusa poco convincente sobre estar cansado, lastimado, o lo que sea.»
Después de leer esto tal vez cambie tu opinion al respecto, si creías que esa persona tiene algo en tu contra..Si estas incomodo, debes aprender a estar cómodo… si no puedes mas, hay un código universal que todos debemos respetar, se llama TAP.!
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