El jiujitsu esta lleno de historias de superación, y el día de hoy vamos a platicarles la historia de Carlos Alvarez, mejor conocido como «Carlitos» por su compañeros y maestros. El ya era practicante de jiujitsu cinta azul en Ecuador con los hnos. Iturralde, cuando por un glaucoma congénito empezó a perder la vista gradualmente, hasta llegar al 100% de ceguera. Esto no lo detuvo en su practica de BJJ, al contrario, lo motivo mas. Empezó a entrenar 4 horas diarias.
Comenta Carlos sobre el efecto del jiujitsu después de perder la vista:
«Me dio una esperanza, por que cuando perdí la vista, lo único que sabia que no perdería era el bjj, tengo mis técnicas y nadie me las puede quitar. Decidí que quería vivir de ello, es mi pasión, me encanta entrenar duro, competir y para mi tiene un sentimiento muy fuerte.»
Sobre como se agudizaron otros sentidos:
«Puedo escuchar al oponente, sus movimientos, cuando saca la cadera, cuando se raspa con el tatami, con eso me guío un poco, pero cuando hago jiu-jitsu es como si viera, cuando inicio una lucha empiezo con una mano en la solapa y en la manga , entonces en mi mente lo visualiza , se donde esta todo, y de ahí luchamos.»
Carlos tuvo la oportunidad de graduar a un alumno como instructor de programa Blind warriors jiujitsu. Un proyecto para que personas invidentes puedan entrenar jiujitsu. La leyenda del valetodo y Jiujitsu Mario Sperry tiene una hija que también perdió la vista y el jiujitsu fue una gran terapia, de ahí se contactaron para unir fuerzas.
Carlos despues de ser graduado a cinturon negro comento lo siguiente:
Muchas felicidades Carlos, de parte de toda la familia de Pasando Guardia. Eres inspiración para muchas personas. Oss profesor!